Con el anuncio del Reino Unido de abrir el debate sobre la necesidad de crear nuevas centrales nucleares en su suelo, y ante el precio actual del barril de crudo, más de 100 dólares el texas y casi 100 el brent. Volvemos a retomar la vieja discusión sobre la necesidad de abrir nuevas centrales nucleares o no .El reparto por Europa de la energía nuclear es bastante desigual, desde Francia con 59 reactores funcionando, Alemania 17, Reino Unido 19, Suecia 10, España 8, Bélgica 7 , República Checa 6, Suiza 5, Finlandia 4, Holanda 1 e Italia ninguna. Esta escala hace depender del petróleo de forma inversamente proporcional al número de reactores abierto, excesiva dependencia de la energía fósil, sucia y contaminante responsable del calentamiento global, a la vez que por esa misma razón nos hace incumplir sistemáticamente el compromiso de Kyoto.
Esta tesitura no resulta fácil ya que no existe, por el momento ningún tipo de energía capaz de competir con la nuclear a nivel económico si no queremos vernos abocados a una peligrosa recesión económica de manos del precio de la energía, como sucedió en 1973 con la 1ª crisis energética que empobreció a los países desarrollados y de rebote y de forma más grave a los subdesarrollados.
Francia obtiene ahora mismo cerca del 80% de sus necesidades energéticas de la energía nuclear, por otro lado Italia sin ninguna central abierta paga la energía un 25% más cara que el resto de Europa, lo que le obliga a encarecer brutalmente los costes de producción haciendo su industria menos competitiva. Alemania por otro lado no se atreve, de momento, a abrir nuevas centrales, pero prorroga las 17 ya existentes ante el panorama energético mundial. En España por un lado las eléctricas españolas instan a imitar el camino británico dado la gran dependencia del petróleo, y por otro se firma el acuerdo con Francia para traer hasta Cataluña energía francesa de origen nuclear desde Perpiñán hasta Figueras.
