Asistimos otra vez al "Agua Alta" de Venecia. Otra vez las sirenas sonando en toda la ciudad, avisan a los venecianos y a los miles de turistas, que la bella ciudad, la "Serenísima" vuelve a estar inundada, y que si quieren salir tienen que prepararse de botas altas y de paciencia para poder transitar por sus anegadas calles. Otra vez, el Siroco, el viento del Sur permite al Adriático inundar la ciudad, y en este caso elevando las aguas más de un metro y medio en la Plaza de San Marcos. No por repetida la imagen deja de sorprendernos por su decadente belleza, y por su singularidad. Estamos todos a la espera de que en 2014 se inaugure el "Plan Mose" o Moises, por lo de rescatada de las aguas, y que consiste en que cuando se prevea la llegada de una inundación, tres magníficas compuertas, surjan del fondo de la laguna y taponen los tres pasos abiertos al mar. Esta es nuestra esperanza, y la verdad es que no dejamos de correr contra el tiempo, sabiendo que es él el que lleva las de ganar.
