
No sabemos cual es el punto de mira más adecuado para contemplar la única de las siete maravillas de la antigüedad que todavía permanecen en pie, y una imagen "zenital" siempre viene bien. Estas tres enormes pirámides que fascinaron a Herodoto y a Alejandro, a Julio Cesar y a Napoleón. Son testigos mudos de la historia de la Humanidad, o por lo menos de la humanidad histórica. Estas tres maravillas brillan en la Tierra al igual que brillan en el cielo las estrellas del Cinturón de Orión, y cada vez que las contemplamos nos quedamos mudos ante su grandeza y ante su misterio. Nada había hasta entonces tan alto, nada había hasta entonces tan grande. ¿Donde están los puntos de referencia y las perspectivas?. ¿En que se fijaron?, ¿Con que, o con quien se quisieron comparar?. Hay un dicho que dice que cuando nada permanezca ellas permanecerán